
Antes del papel
Antes siquiera de pensar en si será un personaje alto o bajo, con unos ojos de color rojizos o verdosos, tenemos que pensar en varias cosas: ¿es humano, animal, de otro planeta? ¿Cuál es su género? ¿Qué edad tiene? Nos tenemos que hacer preguntas genéricas para que nos ayude a generar una silueta a groso modo del personaje. Una vez definido, hay que pensar en su carácter. Si es un personaje despreocupado, nervioso, pícaro, paciente o ansioso… Pensar en sus gustos también ayuda a definirlo aún más. Si es un personaje muy deportivo, viajero, que le guste comer mucho… Podemos incluso pensar en una profesión, aunque esto, generalmente, va ligado al tipo de juego en el cual estás trabajando.